Por: Gilberto Jiménez Carrillo

Para la exregidora y exdiputada Patricia Jiménez, una alianza entre el PRI y el PAN en las elecciones federales del año próximo tendría el rechazo de los ciudadanos. En una alianza electoral entre los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN), definitivamente ni los panistas votarían por ésta, afirmó la exsecretaria general del PAN en Durango, Patricia Jiménez Delgado. “Definitivamente no sería conveniente juntarnos con el PRI, porque estas siglas están muy desgastadas y a Acción Nacional no le convendría para nada”, apuntó. Si yo tuviera que darle mi dinero a guardar a un panista o a un priista, definitivamente elegiría al miembro de Acción Nacional, pues dárselo al priista sería como regalárselo a un ladrón, pero si tengo que dárselo a un panista que va acompañado de un priista, entonces no se lo doy a nadie por temor a que el priista convenza o se lo robe al panista, o igual se lo doy a guardar a otra persona de preferencia una mujer Morena, esto porque la reciente y sospechosa amistad del panista con el priista,  me haría perder la confianza en el azul.

Tiene razón Paty Jiménez, pues pensar en una alianza con el tricolor traería consecuencias negativas para el partido fundado por el originario de Batopilas, al grado que ni los panistas votarían por esta alianza. Basta con ver la reciente detención de dos pillos priistas, el exgobernador de Chihuahua y Emilio Lozoya, bribones priistas que están a punto de ser extraditados acusados de corrupción, de rateros para que se entienda mejor. Si bien es cierto el partido fundado por el “Turco” es el que más presencia tiene en gobiernos locales, también es cierto que es el más desprestigiado y, por lo mismo, con mayor dificultad para ganar. Su difícil pasado se asocia con el tema de la corrupción. De manera que a este partido le super urge amafiarse con el PAN, partido de doctrina y formación totalmente diferente, que salvo excepciones lo componen hombres y mujeres honorables, y digo excepciones, porque los exgobernadores priistas de Veracruz, Chihuahua, Colima, Nuevo León, Tamaulipas, Michoacán, Quintana Roo, Nayarit, Coahuila y Tabasco,  algunos fueron encarcelados por ratas, mientras que otros en eso andan, al contrario del PAN, solo existe el caso del exgobernador de Aguascalientes que fue acusado de malversación de fondos públicos, que diferencia diez contra uno.

¿A poco con estos hampones quiere hacer alianza el PAN? El PRI es un partido que durante casi 80 años cortó el bacalao en la política nacional y en la actualidad, con trabajos, apenas corta una sardina. El otrora apodado partidazo, al parecer, ya no les interesa ni a los que antes, que en el tiempo de las alforjas gordas, se declaraban orgullosos cofrades de la institución. Si no les interesa a ellos, menos debe de interesarle a los panistas, ¿O acaso no tienen la creatividad y los elementos para hacerle frente a Morena?  El problema del PRI no es que presente buenos candidatos, sino que la marca en algunas entidades, como es el caso de Durango, está muy desprestigiada por la tolerancia con la corrupción. El voto de los ciudadanos en las futuras elecciones será dirigido a lo que consideren Gobierno y legisladores honestos, eficaces y responsables, por lo que hacer alianza con el partido de Salinas de Gortari y Peña Nieto sería un suicidio para el PAN y un salvavidas para el PRI. Tiene razón Paty, una alianza electoral con el PRI tendría el rechazo de los ciudadanos.

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