La situación del fraude con las viviendas a un costado de la colonia Miguel Hidalgo ya se había advertido anteriormente, cada vez van saliendo nuevos «líderes» que según son mediadores para conseguir terrenos en presidencia y gobierno del estado, en este tema quienes más salen afectados son las personas más necesitadas que quieren una vivienda y entregan dinero al mediador, termina siendo una estafa.
Así lo dio a conocer el licenciado Samuel Portillo, director de desarrollo urbano de la Presidencia municipal, mismo que señaló que en repetidas ocasiones se les advirtió por medio de los medios de comunicación de que para cualquier compra, venta, u ofrecimientos de terrenos o casas en la ciudad, visitaran las oficinas de desarrollo urbano municipal y del estado.
Inclusive en el registro público de la propiedad se podía preguntar, esto para que no cayeran en las estafas, lamentablemente las personas siguen creyendo en los líderes y en soltar dinero, lo cual afecta directamente al interesado en la vivienda, resaltó.
Asimismo, refirió que algunos colonos dicen que su situación es muy precaria, pero algunos iban a dar 15 mil pesos para comprar un terreno y dos mil por mes, sin embargo nunca se acercaron a la presidencia para pedir informes, «la gente necesita ser más conscientes y es mejor ir a aclaran muchas cosas porque luego caen en el fraude.
Es sabido que luego de que son víctimas de esta situación, van a querer que presidencia y gobierno del estado les arregle la situación, pero no se puede, tienen que saber que para hacer un fraccionamiento son muchas cosas y requisitos, lo cual no es tan fácil, manifestó Portillo.
En lo ocurrido con los vecinos que salieron afectados de las viviendas a un costado de la colonia Miguel Hidalgo, es una culpa compartida entre el vendedor y el comprador, pero los más afectados son quienes compran y más necesitan, «es por sentido común preguntar a una autoridad porque cada vez es algo más grave lo que se presenta, en ese sector es más fuerte porque cada vez salen más líderes», finalizó.