Durango, Dgo.- Mantener la sana distancia de 1.5 metros, es una de las principales medidas para evitar contagios por Covid-19, pero qué sucede en los centros penitenciarios en donde las personas viven en hacinamiento.

El Centro de Reinserción Social (Cereso) número 1 de Durango, es uno de los que presenta este problema, así lo reportan informes nacionales sobre la situación penitenciaria.

En este centro, la población es de tres mil 452, que se dividen en tres mil 210 hombres y 342 mujeres, precisó la directora Arminé Raigosa.

Debido a esto, su sobrepoblación es de poco más de 60 por ciento, ya que tiene capacidad para mil 854 personas.

Es decir que está rebasado por mil 598, situación de riesgo en el contexto de la pandemia.

Los grupos de mayor riesgo al contagiarse de Covid-19 son las personas de 60 años y más, quienes viven con enfermedades como hipertensión o diabetes, mujeres embarazadas, niños de menos de cinco años y pacientes con cáncer o VIH.

De la población en el Cereso uno, 458 son más vulnerables al Coronavirus. Se trata de 112 personas de la tercera edad, siete mujeres embarazadas, un par de niños de dos meses de edad, y más de 200 personas con enfermedades crónico degenerativas.

Al respecto, la directora destacó que diariamente se le checa la temperatura, en el departamento tienen todas las medidas de prevención y el 14 de diciembre pasado hubo campaña de vacunación contra la influenza.

Durango con más contagios

La organización social Asilegal, realiza un monitoreo de la pandemia en centros penitenciarios de México, la última actualización se hizo el 15 de diciembre.

Durango se colocó como el quinto estado con más contagios de Covid-19 en las cárceles.

Son 112 casos positivos y dos defunciones; 60 en el Centro Federal de Reinserción Social (CEFERESO) número 7, de Guadalupe Victoria, y 17 al Cereso número 1.

Sin embargo, el estudio confirmó que hay opacidad en las prisiones, debido al encierro prolongado y extraordinario.

Por esto las estadísticas de defunciones, contagios e incidentes violentos, podrían no ser certeras.

Arminé Raigosa indicó que hace un par de meses, acudió personal de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para revisar.

«Todo encaminado a lo que es el Covid-19, haber si contábamos con todas las medidas de sanidad», dijo.

Aunque respecto a si señalaron obversaciones, respondió «no, hasta el momento no tenemos alguna».

El riesgo del hacinamiento en la prisión

El informe urge a mejorar las condiciones de internamiento de las personas privadas de la libertad, que disminuyan los niveles de sobrepoblación y hacinamiento, para garantizar el acceso al derecho a la salud.

En el caso del Cereso número 1, una de las opciones es el traslado de mil 500 personas al nuevo penal construido a la altura del kilómetro 37 de la carretera Durango-Gómez Palacio.

No obstante, no ha habido ningún movimiento, confirmó la directora.

«No nos han dado fecha todavía para algún traslado», comentó.

En el 2020 la población privada de su libertad en el Cereso más sobrepoblado de Durango, se redujo un dos por ciento, debido a la liberación de 361 personas.

Aún así, el hacinamiento sigue siendo un riesgo en dicha prisión.

Durango, junto con Campeche, Chihuahua, Jalisco y Puebla, presentan la mayor cantidad de contagios en las cárceles.