Hay algo en el terror que nos atrae irremediablemente. Quizá sea nuestro deseo de estar en una situación peligrosa, o puede ser nuestra tendencia a lo desconocido. Entre tantas formas de experimentar terror, el cine y los videojuegos son la favorita de muchos. Ya sea por la calidad de sus historias o por la inmersión que provocan, está claro que son medios perfectos para sacarnos un buen susto.

De entre todos los subgéneros del terror, hay uno específico que le viene de maravilla a estos medios. Se trata del found footage, un estilo que involucra lo perturbador y desconocido con lo tangible y lo relacionable. Hoy te contamos de qué trata.

¿Qué es el found footage?

Este tipo de terror es uno que se cimenta en la experiencia en primera persona. Si lo traducimos del inglés significa «metraje encontrado», esto en alusión a las cintas que giran en torno a esta dinámica: personajes que encuentran una cinta de video que ha registrado eventos paranormales.

Para este punto, el subgénero ya puede considerarse un clásico. Su gran momento se puede identificar con la película The Blair Witch Project del año 1999. Esta cinta abrió la puerta del género que se consolidaría en la primera década del dos mil.

En general, siguen un patrón bastante claro en su desarrollo. Un grupo de personas se adentra a territorio desconocido o embrujado. Para llevar un registro de lo que sucede, llevan consigo una cámara que graba en todo momento. Gracias a ella, los espectadores somos testigos de lo que ocurre a cada momento, dando paso a escenas que son inmersivas por el juego que se hace entre lo real y lo ficticio.

Todo sea dicho, el género se ha saturado en los últimos años, al menos en el cine. Si nos vamos a los videojuegos, la tendencia igual es constante, pero la naturaleza de este entretenimiento da pie a nuevas experiencias que cambian por completo los parámetros conocidos.

¿Qué películas o juegos son de este tipo?

En el cine hay grandes ejemplos: la saga REC, Actividad Paranormal y Blair Witch serían las mejores opciones. Sobre todo, porque son cintas que definieron al género. Si te sientes más experimental, la saga de cortos V.H.S. son una excelente opción.

Los videojuegos tienen buenos candidatos también. Resident Evil VII y VIII para experiencias modernas, Killing Floor si buscas algo más de acción y Outlast, que a pesar de sus años todavía se mantiene en buena forma.

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