Mientras que la mayoría de los hombres afirman que han alcanzado el orgasmo, el porcentaje de mujeres es mucho menos. Te contamos algunas razones detrás de esta brecha orgásmica entre géneros.
La frecuencia de los orgasmos masculinos es mayor que la de los femeninos, de acuerdo con un estudio de Archives of Sexual Behavior de 2018, el 95 por ciento de los hombres heterosexuales aseguran haber experimentado el clímax, mientras que solo el 65 por ciento de mujeres heterosexuales lo han hecho; en el caso de las mujeres lesbianas, ese número aumenta al 86 por ciento.
Para muchos especialistas el orgasmo femenino aún es un tema con mucho por investigar y es que en él influyen factores diversos como físicos, hormonales, psicológicos y emocionales. A continuación te compartimos algunas de las razones más usuales por las que a un gran porcentaje de mujeres le cuesta más llegar al orgasmo.
Autoexigencia
Uno de los principales factores que impide el orgasmo femenino sucede cuando una mujer busca tanto alcanzar el clímax, que al no conseguirlo se bloquea. Esto tiene que ver con un problema social, ya que las mujeres suelen comparar sus experiencias con otras y piensa que puede haber algo malo con ella.
Desconocimiento del cuerpo
La educación sexual está enfocada en las enfermedades de transmisión sexual o los embarazos, es por ello que se deja a un lado el placer que también es un factor importante en la sexualidad. En el caso de las mujeres, se le suma el desconocimiento sobre sus propios cuerpo.
Estimulación inefectiva y escasa
Anteriormente, las parejas dedicaban poco tiempo a la estimulación previa, especialmente en el caso de las mujeres, y aunque eso ha cambiado, aún sigue existiendo problemas de estimulación a causa de la falta de comunicación para expresar qué es lo que los exista y qué no. Este punto se puede deber por vergüenza o temor a dañar los sentimientos de la pareja.